
La historia de cómo Dios alimentó durante 40 años en el desierto a la nación de Israel es asombrosa, verídica y milagrosa. Y hay en ella algunos detalles que no se deben perder de vista. Primeramente Dios les ordenó que recogieran una porción de maná para cada día, la suficiente para cada uno, la que se quisiera comer, era autoservicio gratuito, pero sólo se debían servir lo del día, no podían guardar.
Sin embargo, no faltaron los que se las quisieron dar de muy inteligentes y tomaron para ese día y para el siguiente, “por si acaso”, pero resulta que al otro día el maná guardado tenía gusanos y olía mal.
En segundo lugar, Dios les ordenó que el día sexto recogieran el doble de maná para que al otro día, que sería el séptimo, descansaran, se quedaran guardando el día de reposo y no salieran de casa, porque ese tiempo no sería de trabajo sino de adoración para Dios. Además en esa fecha no caería pan del cielo. Y como cosa curiosa en esa ocasión el pan adicional que habían llevado no había criado gusanos ni olía mal, sino que había amanecido fresquito. Sin embargo otra vez los que se las quieren dar de muy sabios salieron al campo a buscar el maná y no encontraron “maj na”, o nada más.
Nuestra mente humana y desobediente hoy en día estaría tratando de desarrollar algunos refrigeradores para congelar maná y venderlo en los días siguientes. Seguramente aparecería el especulador que lo escondería para subir después el precio. Y otros conseguirían una camioneta con altoparlante e irían de casa en casa ofreciendo el producto: “a llevar el maná fresco, a llevarlo, compre tres y pague dos, el manaaaaa”.
Pero lo que Dios quiere enseñarnos es que dependamos de Él, cada día, que confiemos en Él para cada una de nuestras necesidades. Él no quiere que dependamos de “un pan que cae del cielo”, Él quiere que dependamos del “Panadero” que nos suple en todas nuestras carencias.
Y esto es bien simple de entender, porque si lo que tú buscas es un milagro de sanidad y no al Sanador, entonces te darás cuenta que aunque hoy te sanaste del estómago, mañana tal vez necesites sanarte del corazón. Y si lo que buscas es un milagro de provisión y no al Proveedor, te darás cuenta que aunque hoy pagaste al banco la mensualidad atrasada, en cuatro semanas tendrás que volver a pagar otra cuota.
Ya no busques el milagrito, busca al Dios de los milagros. Sé sabio, no te lleves el pan del cielo, llévate al Panadero Celestial, hazlo tu Señor, tu Dios y tu Salvador.
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Tomado de:
“Devocionales en Pijama”
de Donizetti Barrios
Derechos reservados de autor.
Es bueno saber que podemos confiar en Dios cada dia. bendiciones.
Instrumentos de Dios son ustedes, siempre los escucho en el trayecto del trabajo para la casa como a las 11: 15 pm a través de la emisora 102.7 enlace, han sido un super refuerzo muy edificante ahora que conozco de Jesucristo, y se lo mucho que me ama y que si lo fuera encontrado antes me hubiera ahorrado muchos sufrimientos y problemas sin embargo los planes del Señor son perfectos.
Por primera vez expreso literalmente mi pinion. Debo aclarar que todos los temas de Devocionales en Pijama me gustan, los encuentro constructivos y educativos, pero hay algunos que me inpactan más que otros. Dios te provea con todo lo que tú deseas para ser feliz en este mundo, por que si hay otro, pero no será igual, dado que careceremos de materia.
Te amo.
Your mother.
que lindoo Doniiii
noemi salio de belen porque no había pan, y no había pan porque no había panadero, después noemi regreso a belen con rut porque ya había pan en la panadería (belen es casa de pan) así pasa en muchas iglesias, que son solo estantes,vitrinas vacías sin pan y nos quejamos que la gente no va a la iglesia busquemos de corazón al mismo pan del cielo y que nuestras iglesias sean panaderías que dan de comer a los hambrientos “y noemi regreso con rut a belen porque se supo que ya había pan”
Muchas gracias !!, muchas Bendiciones hermanos !,,
Amen!!! Es siempre bueno confiar en Dios, y poner todos nuestros anhelos, preocupaciones, y nuestra vida entera y la de nuestras familias, sean estos convertidos o no en sus manos. Como buen panadero, nuestro Padre ira moldeando cada una de nuestras vidas, en el tiempo de el. Dejemosnos llevar por el, creamosle a el, dejemos todas nuestras cargas y preocupaciones en sus manos, que el sabe como poner cada cosa que no esta en su lugar, en el lugar que debe de ir. Solo es cuestion de mantenerse alerta, escuchando su voz. De mantener obediencia delante de sus mandatos, de mantener una fe firme aunque la tormenta ruja alrededor. El cambiara nuestras vidas. Bendiciones para todos! Gracias Donni, por los devocionales tan bellos que nos regalas cada mañana. Dios te bendiga.
Mi hermano, no hay ninguna duda al respecto, uno de los repartidores del pan fresco del panadero celestial ¡ERES TU!
Bendiciones de todo tipo sobre tu vida!
Jesús es el Señor!!!!!, Doni gracias por su tiempo en escribir estas cosas edificantes, en este momento tengo una prueba muy muy grande con la salud de mi amadisima esposa le pido su ayuda en oración por ella su nombre es Felicidad Rebeca Romero
Talvez suene repititivo dony pero de verda gracias,gracias porque me haces reflexionar siempre con tus devocionales y de que manera..un abrazo rompe costillas.y que Dios lo siga iluminando
Muy buen mensaje, gracias los quiero..